RPS: ¿Podrías hacer una breve presentación de ti para las personas que lean esta entrevista?
Pepa Beiras: Soy Pepa Beiras Torrado, Gallega, de Santiago de Compostela. En origen soy fundamentalmente científica, mi profesión y mi devoción son la ciencia no la política. La política me interesa por compromiso con la sociedad. Milito en IU porque fuera hace mucho frío. Estoy en la dirección provincial, como parte de la dirección ejecutiva colegiada, y además soy la coordinadora del área de medio ambiente y como sabéis, los que me conocéis, soy la coordinadora de la asamblea local de Cartaya. Esas son todas mis responsabilidades.
RPS: Has vivido muy de cerca, según tengo entendido, dos procesos de conformación de unidad, uno para formar gobierno, nos referimos a la unidad de IU con el PSOE en la Junta de Andalucía. Y el otro el de la formación de AGE en Galicia. ¿Qué diferencias y similitudes ves entre los dos modelos?
Pepa Beiras: Diferencias casi todas, similitud casi ninguna. En el caso del gobierno de la Junta de Andalucía es una cuestión que tiene que ver más con la necesidad urgente de impedir el aterrizaje del PP en la Junta, que con una afinidad política entre ambas organizaciones. La falta de afinidad no se debía tanto a las distancias ideológicas e históricas, que también las hay, como a la deriva que el PSOE ha tenido a lo lago de los últimos 20 años, por poner una cifra, y también por el cainismo con el que el PSOE ha tratado siempre a cualquier izquierda. Por lo tanto conseguir ahí un acuerdo era una cuestión muy difícil, requería muchísima generosidad por parte de la militancia de IU y mucho espíritu de compromiso con la sociedad que muchos entendíamos que sí, que nos exigía que si teníamos esa oportunidad, teníamos que frenar la llegada del PP.
Por lo tanto, después se puede entrar a valorar cuales fueron los acuerdos, el interés o no de ese acuerdo de gobierno, y entrar a valorar qué pensamos unos meses después de haberlos alcanzado. Pero insisto, era una cuestión de urgencia, más que una cuestión de convergencia de proyecto del PSOE e IU.
Quizás el ultimo que acabo de decir puede que sea la única similitud que existe entre la conformación de un equipo de gobierno como el de la Junta de Andalucía y la formación de un frente como AGE. Es decir, el lema, la llamada que se hizo en Galicia fue “ Hai que paralos”, por lo tanto se vio la necesidad urgente de parar un gobierno, no ya de la derecha, sino de la extrema derecha, que estaba procediendo a un desmantelamiento de todo lo que es la cultura, la estructura económica y social, gallega, española y europea. Eso es lo que tienen en común, esa llamada de urgencia que se fundamenta en una serie de puntos que hoy son comunes a oda la izquierda europea (banca pública, gestión democrática de las empresas, economía social, fiscalidad justa, etc.). Pero se plantea no solamente como una fuerza unificadora, sino como una manera de hacer política diferente que incluye un modo de organizarse también diferente. Y es en este último aspecto donde pueden surgir las desavenencias. Porque hay una organización como es ANOVA, que tiene claramente una voluntad asamblearia, digamos un neo asamblearismo que se fundamenta en las experiencias actuales de los movimientos indigenistas. Experiencias que van más allá de lo que ocurre en territorio europeo, pero que al mismo tiempo incorpora experiencias históricas de lo que se quedo atrás en el siglo XX, que eran movimientos libertarios, movimientos horizontalistas, que no se incorporaron a la práctica política del siglo XX. Por otro lado está IU de corte más jerarquizado, que si bien es verdad que es una organización con espíritu asambleario, todos sabemos que el PCE puede mucho dentro de IU en cuanto a marcar dinámicas, con lo que dificulta bastante el flujo de voluntades de abajo a arriba. Mientras que ANOVA esta empeñada en es manera de construir, que no existan ponencias, que no existan documentos marco, sino que todo se decida desde abajo, eso puede crear verdaderos problemas entre las dos fuerzas principales.
En definitiva, hay muy poco parecidos entre el acuerdo de gobierno en la Junta de Andalucía, donde no se pone en cuestión la manera de hacer política, no se pone en cuestión el sistema. En cambio en el acuerdo de hacer un frente electoral si se pone en cuestión la manera de hacer política y el sistema. Para mi esa seria la diferencia más importante.
RPS: ¿Qué te gusta del gobierno de la Junta de Andalucía y qué no?
Pepa Beiras: No me gusta la falta de aire fresco. No me gusta el tono, es excesivamente continuista excesivamente parecido, y te estoy hablando en primer lugar de las formas, porque creo que las formas son importantes, porque los ciudadanos lo que vemos son las formas. No me gusta, por su puesto, el que el PSOE ningunee a IU, y lo hace siempre que puede. Es un desequilibrio, una asimetría que existe en la influencia que podemos tener a la hora de tomar decisiones. Me gustan fundamentalmente, aquellos aspectos en los que se ha podido frenar el carro de lo que estaba pasando. Me gusta la política de vivienda, en la medida que se está consiguiendo hacer muchas cosas, me gusta la trasparecía, que es mayor que la que existía, y pocas cosas mas que me gustan, la verdad. Globalmente, creo que no hemos conseguido gran cosa, si hemos conseguido, evidentemente que las cosas no empeoren, que ya es mucho. Si hay que ser modestos hay que darse con un canto en los dientes, pero yo no formo parte del sector que se encuentra notablemente satisfecho, simplemente, creo que si hay que hacer un balance, lo hago positivo, porque la situación de los servicios públicos, de los trabajadores no ha empeorado todo lo que podría empeorar sino estuviéramos en el gobierno. Y eso es lo más que podemos decir. Me parece un poco triste, pero las condiciones que tenemos son las condiciones que son. Con lo de las condiciones me refiero a que yo no concibo un gobierno sin un pueblo. SI la gente vota, pero a continuación espera simplemente, pues evidentemente hay poco que hacer. Yo creo que los retos que tenía el proyecto del programa de IU, solo sale adelante si se encuentra con un pueblo movilizado. Y eso pues en estos momentos es escaso. La falta de conexión que pueda haber entre quienes ejercen la política institucional y quienes ejercen la militancia de calle, la conexión entre los movimientos ciudadanos y los políticos son también cuestiones que concurren para que los resultados sean más modestos de lo que podrían ser.
RPS: ¿Qué opinión tienes de la sensibilidad que había dentro de IU que apostaba que lo que había que hacer era apoyar con una serie de exigencias, la investidura de Griñan, para parar al PP y pasar después a la oposición?
Pepa Beiras: Yo no fui de esa opinión en su momento, a pesar de que lo dudé mucho. Yo soy de las personas que en el proceso de debate interno que se tuvo, para el referéndum que se tuvo, del mismo modo que fui de la últimas en decantarme para el sí, también soy de las que luego resisto mas las decepciones, ya que yo tenía muy poco claro que nosotros pudiéramos conseguir como fuerza política, mejoras suficientes como para que la imagen que diéramos no fuéramos de cómplices. Nos jugábamos, no ya solamente que fuéramos capaces o no de realizar transformaciones sociales, sino que nos jugábamos también nuestro futuro como fuerza política. Y no es que a mí me importa mucho el futuro de IU como organización política, porque yo soy muy poco sectaria. Estoy en esa organización porque mis alternativas que creo que debo sacar adelante, se recogen bastante bien en el proyecto político de IU. Por lo tanto lo que me preocupaba no era tanto el futuro de IU, sino de una organización política que pueda representar en un momento determinado, el ser el aglutinante de una movilización ciudadana ante un sistema en descomposición. Por eso yo tenía claro que era más probable que pasáramos por cómplices que por “salvadores” de una situación. No me parecía factible votar la investidura y quedarnos en la oposición, porque nos quedaríamos sistemáticamente votando con el PP. Nuestro papel sería de cara a la sociedad el de que al final IU no permite que la izquierda gobierne en Andalucía y le abre el paso al PP.
En el debate sobre esta cuestión, me molesta el simplismo de dos opciones netas: estar a toda costa en el gobierno o salirse ya mismo del gobierno. Creo que no tenemos que estar en el gobierno a toda costa sino para sacar adelante lo que propusimos, en estos momentos lo que tenemos que hacer no es salir del gobierno, nosotros no tenemos que romper la baraja, nosotros lo que tenemos que hacer es que nos echen del gobierno, por nuestra postura, por lo que sostenemos, porque no tragamos. Incluso hay cuestiones que no son de programa, sino de respeto. Tendría que darse un debate que le haga llegar a quienes nos representan en las instituciones cuales son las posturas que firmemente estamos dispuestos a defender en la calle. En lo que se refiere a las opiniones que se publicaron en contra de entrar en el gobierno, en su momento, me merecen todas mucho respeto. Lo que no me han gustado han sido las acusaciones de tongo y manipulación ante los resultados del referéndum interno, los resultados eran indiscutibles. A gusto de unos y a disgusto de otros. Y el proceso fue, en mi opinión, perfectamente libre y transparente. Mi percepción es que la gente tenía mucha ilusión y ganas de entrar.
En el capitulo de los errores cometidos en el proceso de negociación yo incluiría lo siguiente. La militancia exigía no negociar puestos, sillones, poder, recogiendo el malestar social ante la practica política habitual. Por lo tanto se negocio programa y se votó el acuerdo de programa. Una vez realizado el referéndum, la abrumadora mayoría en el referéndum reforzó más al PSOE en su negociación que a IU y así la reestructuración y reparto de consejerías se hizo más a su gusto que al nuestro.
RPS: Desde tu posición de mujer gallega de izquierdas ¿Crees que la izquierda debe inspirarse en estos momentos en la experiencia que supuso el Frente Popular?
Pepa Beiras: ¡Eso por supuesto claro!
Lo que pasa es que como cada momento de la historia es diferente, pues supongo que los que saben de política, y me refiero fundamentalmente a los que saben de historia política y saben analizar los fenómenos sociopolíticos, podrán apuntar qué modificaciones habría que realizar en el modelo, cuestiones que no estaban en aquel contexto, pero creo que si, absolutamente, creo que si, que el Frente Popular es un modelo a seguir, un modelo en que inspirarse.
RPS: En Grecia se ha configurado Syriza, en Francia el Front de Gauche, en Galicia AGE, si de ti dependiera la decisión como responsable de IU, ¿qué pasos pondrías en marcha para que se avanzara a la unidad de la izquierda?
Pepa Beiras: Bueno, muy difícil, si lo supiera, ya los habría puesto. Vosotros lo sabéis, es un tema que a mi preocupa mucho. SI yo supiera lo que hay que hacer para avanzar hacia la unidad de la izquierda ya lo estaría haciendo. De momento, no se me ocurre nada mas que el buscar espacios de encuentro. Por eso creo que es muy importante que las organizaciones políticas se encuentren en la búsqueda de alternativas reales. Además de IU como organización, milito en cantidad de frentes, desde la “marea azul”, la “plataforma de defensa del Rio Piedras” a la de los servicios públicos, etc. etc. Yo creo que es en esos espacios, trabajando codo con codo con las diferentes organizaciones, es donde se funden las diferencias y se encuentran las convergencias. A mí me pareció en principio muy bien la iniciativa que se tuvo en IU de convocatoria social. Me parece muy interesante. Lo que pasa es que eso topa con un problema, que es el problema de las rencillas. Pienso que esas rencillas están a mitad de camino entre personales e históricas, es decir, no se va a avanzar hacia la unidad de la izquierda mientras determinadas personas no desparezcan del panorama político, así de claro lo digo, porque representan una manera de hacer, Lo que no nos evita el riesgo de que sean sustituidos por personas exactamente iguales pero más jóvenes, con los mismos valores, con el mismo modo de funcionar, Creo que realmente hace falta que entre en política una manera de hace política femenina. Yo siempre digo que cuando veo a los hombres de mi generación y más jóvenes mantener “peleas de Gallo” de “quítate tú para ponerme yo. Peleas en las que te das cuenta de lo que está por delante es la soberbia de cada cual y no el objetivo que se persigue entre todos, lo que está delante es “quien tuvo la culpa” quién agacha la cabeza o se retira primero. A mi entender es necesario hacer política de un modo más femenino, más cooperativo, con menos liderazgos y protagonismos. Eso llegará. Pero por el momento en las organizaciones políticas los individuos competitivos van sustituyendo progresivamente a los individuos cooperativos, es una desgracia pero es así. Cuando ahí alguien que no necesita figurar, que no necesita que le alaguen el ego, que esta simplemente porque tiene algo que aportar, ese alguien acaba siempre cediéndole el puesto a otro alguien que si necesita sentirse imprescindible y figurar. Ocurre a medida que la organización va teniendo mas audiencia, más espacio, más poder, el personal más competitivo va aumentando a expensas del personal cooperativo y el resultado son las organizaciones políticas que tenemos. No hay mecanismo de control que pueda impedir eso, solo de paliarlo, porque depende de la ética individual y de los valores sociales. Y cuando aparecen los protagonismos, la competencia, los partidismos y cuando nos vemos, más por defender un espacio electoral que el proyecto, entonces ya no puede haber unidad de la izquierda ni nada que se le parezca.
Yo propondría sentarnos todos los que queramos, poner el mínimo de etiquetas previas posibles tanto si nos referimos al modelo de gobierno, en el que la etiqueta mínima sería república, como si nos referimos al modelo de estado, en el que la mínima sería el respeto por la autodeterminación. Ya hablaremos luego del modelo de estado, que a lo mejor hay que hablar antes del modelo de Europa. Pero lo fundamental en estos momentos es que pongamos sobre la mesa cuales son nuestras prioridades, cuales son las urgencias en este momento, eso es lo que ha permitido que ANOVA e IU vayan juntos. Hay urgencias que atender y la historia ha transcurrido y hoy en IU hay un debate interno en relación al modelo de estado que permite un acercamiento hacia una organización nacionalista como ANOVA, impensable hace 15 años. De hecho IU tiene previsto, antes de que se acabe 2013 una conferencia sobre modelo de estado.
Lo que nos une ahora es la lucha contra lo que supone el neoliberalismo. ¿Vamos a discutir ahora si sobre lo que tuvo que haber habido era ruptura democrática? ¿Vamos a pelearnos porque unos consideramos que tendría que haberla habido y otros en cambio son herederos de los que no la hicieron? No hombre no. Vamos a hablar de que analizando la historia se cometieron una serie de errores….si vale. Pero ¿yo que quiero en este momento? Y ahí esta la decena de puntos en los que estamos de acuerdo toda la izquierda europea. Que hay que devolverles a los trabajadores el control del sistema productivo, por ejemplo, hay que nacionalizar los bienes estratégicos, los servicios públicos, la reforma fiscal, la banca publica, eso es en lo que estamos de acuerdo, es lo que nos une.
RPS: ¿AGE pone ahora sobre la mesa, más allá de los debates sobre los errores pasados, la ruptura democrática encima de la mesa como condición para la unidad?
Pepa Beiras: SI. Está encima de la mesa No te puedo decir ahora mismo de qué manera figura, pero si está puesto encima de la mesa.
RPS: ¿Estás al tanto de la J.E.R.?
Pepa Beiras: No
RPS: Es una iniciativa del P.C.E. en el año 2012.Ala que se invitó a organizaciones tales como Ciudadanos por la República, Unidad Cívica por la República e Izquierda Republicana. En diciembre se celebró el segundo encuentro en el que se sumaron I.U. y Republicanos entre otras, así como agrupaciones locales. En el que, dichas agrupaciones, se comprometían a impulsar, en un plazo de dos meses, las Juntas Republicanas Locales y Provinciales. Así como republicanizar las luchas concretas.
RPS: ¿Qué significa para ti la lucha por la República?
Pepa Beiras: La República es imprescindible. Lo que pasa es que me identifico poco con el Estado, Con el gobierno central. Desmontaría el gobierno central. Partiría desde cero a otra cosa.
Hay que debatir el modelo de Estado que queremos y tengo claro que hay que tumbar el Régimen. No quiero una monarquía.
Pero no me mueve la llamada a la República. Creo más Prioritario centrarnos en el derecho a la autodeterminación de los pueblos. Tal vez porque, como gallega, me siento como si hubiera nacido en una colonia y que tal o cual ocupe el Gobierno central no es lo importante, lo importante es que no tiene que haber colonias. No podemos construir una República y que después ella decida cuánta soberanía reparte. Primero debemos reconocer el derecho a la autodeterminación de los pueblos y que ellos decidan a quién y bajo que criterios ceden soberanía: solidaridad, lucha de clases, etc.
RPS: ¿Ves la lucha actual por la República como un reflejo de la lucha de clases, como una ruptura democrática con la oligarquía?
Pepa Beiras: No, puede ser una república como la francesa. De corte centralista neoliberal y controlada por oligarquías.
RPS: Pero teniendo como referencia la lucha por la República en este país como la lucha por un Estado democrático de trabajadores de toda clase, en el que se garantice el derecho de autodeterminación y los derechos de las clases populares. ¿Sería así la República el objetivo?
Pepa Beiras: Si, pero si le vamos poniendo etiquetas nos vamos quedando solos. Para mi no es garantía llamar a la unidad a través de la República porque hay republicanos de derechas.
Mi banderín de enganche serian más bien las medidas concretas de las que os hablé antes.
Me interesa la transformación social y si bien hay que acabar con la monarquía será más fácil a través de la lucha de clases que con el banderín de la República. La República no es suficiente.
RPS: ¿Y si la República se definiese como un modelo de estado ligado a cuestiones de avances democráticos esenciales? Que conste que nosotros no creemos que baste con elegir al Jefe del Estado.
Pepa Beiras: En un futuro tendremos que tener un Jefe de Estado que podamos quitar igual que lo hemos puesto. Pero ¿con quién me voy a aliar para ello? Pues con quién busque un modelo de sociedad como el que busco yo.
RPS: ¿Qué mensaje le trasladarías a la gente de izquierdas para avanzar?
Pepa Beiras: No me siento cualificada como militante para dirigirme a la izquierda pero si como ciudadana. Espero de la gente que aspira a representarnos valentía y confianza en nuestra autoridad moral de hablar, opinar y defender nuestra posición en todos los foros. Valentía para romper las normas que nos impusieron y que nos hacen jugar en inferioridad de condiciones siempre.
RPS: ¿Crees que los programas y las medidas que proponemos desde la izquierda no se llevarán a cabo sí no se produce la ruptura democrática?
Pepa Beiras: Si, soy de esa opinión.
Aunque parezca contradictorio yo me presenté a unas elecciones. Pero es solo una forma de tener la oportunidad de contar tu versión. Hay dos formas de hacer las cosas: una tomar las armas y la otra es tomar las instituciones. Una vez que has tomado las instituciones montar el número. No podemos llegar a las instituciones y a continuación ponernos la corbata.
No puedo soportar que alguien que llega a gobernar en nombre de la izquierda justifique el abandono de aspectos de su proyecto por responsabilidad de gobierno. ¿Significa que no caiga el gobierno? Que caiga cuantas veces tenga que caer mientras no lo haga bien. No canalicemos el descontento de la gente antes de las elecciones para después sosegarlos o adormecerlos.
RPS: ¿La contradicción de llamar a la gente a revelarse y después pedir lealtad institucional?
Pepa Beiras: Si, pero ¿qué quiere decir lealtad institucional? ¿Qué si los dos formamos parte de una institución no podemos mantener discrepancias? Habrá que discrepar y si no nos ponemos de acuerdo la baraja se rompe. En ese momento no hay deslealtad institucional. Ha ruptura de la institución.
RPS: ¿Debemos devolver la democracia a estas instituciones, como ha dicho algún político o por el contrario nunca la tuvieron y ahora lo que toca es tumbarlas?
Pepa Beiras: Claro, no se trata tanto de cargarnos las instituciones como lo que hay en ellas. No me molesta que haya ayuntamientos pero si que se estructure para que los de siempre hagan lo que quieran. Quitar de en medio las que no sirvan y las que si, transformarlas para que sirvan a todos.
Y es importante que el que este al frente debe estar controlado todo el tiempo por los ciudadanos. ¿a través de que mecanismos? De momento solo tenemos las organizaciones políticas que los han puesto ahí y que además deberían evolucionar en lo que se refiere al reparto de papeles dentro de la organización. En mi opinión no es bueno que una sola persona reúna en si misma la carga de responsable máximo de la coordinación de la organización, imagen mediática y candidato o ejerciente institucional. Debe haber cierta separación entre la tarea institucional y la tarea militante.
La izquierda tiene que tener claro sus objetivos y no perderlos. En este momento ni las cortes ni el parlamento son órganos democráticos. Hay que ir a invadirlos y transformarlos porque no son un campo de juego legal. Si las leyes son injustas pues no se cumplen.
Tenemos que dejarnos de hegemonía de siglas porque vivimos una situación de auténtica emergencia. La situación tiene que reventar y me aterra que aparezcan iluminados, entiéndase dictadores, ya sean de derechas o de izquierdas porque soy antilíderes, anticaudillos.
Alberto Royo, responsable de RPS en Cartaya. Sábado 6 de Abril


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