Los sindicatos convocan un paro de once días si la entidad no cambia de planes el martes
Los cuatro sindicatos mayoritarios de Banco Ceiss (UGT, CSICA, UEA y CCOO) anunciaron ayer que han solicitado a la autoridad competente convocatoria de huelga en todos los centros a partir del próximo día 30 y, en principio, hasta el 10 de junio. Según adelantan, en caso de que no se produzca ninguna reacción por parte de la empresa renovarán una tras otra las solicitudes de huelga para proseguir con los paros.
En la mañana de ayer se produjo una nueva reunión entre ambas partes, en la cual las centrales sindicales presentaron a la empresa una nueva propuesta «de cierre» como contraoferta al proyecto presentado por ésta el martes, en la que rebajaban a 1.030 trabajadores la reducción de la plantilla. Tras solicitar un receso, la empresa se ha movido «ligeramente» en algunas medidas poco relevantes, pero ha rechazado «frontalmente» otras que los sindicatos consideran «fundamentales», por lo cual en estos momentos ambas partes se encuentran «muy lejos de alcanzar un acuerdo».
«Las posturas están muy, muy alejadas. El clima de la reunión ha sido diferente al de los anteriores encuentros, pero las posturas siguen alejadísimas», recalcan desde los sindicatos, antes de calificar como «descorazonador» que la empresa «prácticamente no asuma nada».
En la reunión se emplazó a un nuevo encuentro el próximo martes, que comenzará a las 11.00 horas y donde Banco Ceiss presentará previsiblemente una nueva contraoferta por escrito.
Desde las cuatro fuerzas sindicales apuntan que «los plazos se agotan», y a apenas una semana de que expire el plazo previsto para las negociaciones «lamentablemente» no ven voluntad por parte de la empresa para acordar unas medidas que se ajusten a sus «justas» pretensiones. De terminar la negociación sin acuerdo, transcurridos quince días la empresa tendría libertad ‘legal’ para, unilateralmente, comenzar a despedir en las condiciones que considere, respetando los mínimos de la reforma laboral.
El pasado martes, la dirección de Banco Ceiss había ofrecido rebajar en 90 el número de despidos planteado inicialmente en la reestructuración de la entidad financiera, y pasar de 1.120 a 1.030 el recorte de la plantilla que queda de las antiguas cajas. Un recorte que los sindicatos rechazaron de manera tajante, ya que en su opinión el recorte de más de 800 trabajadores resulta inasumible. Los sindicatos insistieron entonces en establecer medidas para mayores de 52 años hasta final de 2019, y complementar sus retribuciones hasta la edad de jubilación. En cualquier caso, insistieron en que no aceptarían bajas que no fueran aceptadas voluntariamente por los trabajadores. Se negocian fórmulas que van desde la indeminziación de 20 días por año trabajado hasta un máximo de 12 mensualidades para los mayores de 60 años a finales de este ejercicio, lo que incluiría a 340 trabajadores; y de un 60% del salario fijo bruto, dos años de carencia y convenio con la Seguridad Social hasta los 63 años para los que tienen entre 57 y 60 años. Para los mayores de 56 años el convenio será hasta los 62 años. La respuesta está en el próximo martes.