Carlos Palomino, el joven de 16 años que fue asesinado hace ocho en el Metro de Legazpi cuando acudía a una manifestación en contra de una concentración de corte fascista, es recordado desde este viernes con una placa situada en el número 145 del Paseo de las Delicias, a pocos metros de donde perdió la vida, placa que se unirá a las que el Ayuntamiento de Madrid instalará para homenajear a otras víctimas de delitos de odio. Condenan a 26 años de cárcel al asesino del joven Carlos Palomino.
La placa lleva inscrito «Aquí fue asesinado el 11 de noviembre de 2007 Carlos Javier Palomino Muñoz a la edad de 16 años. Luchador contra el fascismo y el racismo». La placa ha sido presentada oficialmente ante la madre de Palomino, Mavi Muñoz, amigos del joven, la delegada de Cultura y Deportes, Celia Mayer, y la concejala-presidenta de Arganzuela, Rommy Arce.
Arce ha explicado que Carlos Palomino fue asesinado cuando acudía en Metro a una protesta contra una concentración de corte fascista en Usera, uno de los distritos con uno de los índices de población inmigrante más elevados de Madrid. La concentración neofascista contaba con la autorización de Delegación de Gobierno.
La concejala ha querido aplaudir la labor de Mavi Muñoz y de otras integrantes de Madres contra la Represión, que consiguieron una pena «ejemplarizante» para el asesino de Palomino, con una condena de 26 años a cumplir.
Rommy Arce ha aplaudido la memoria del «héroe» Carlos Palomino y de otros como él, «víctimas de la violencia racista, fascista y machista» que han hecho «con su lucha un Madrid mejor». Son las instituciones, ha declarado, las que deben dar un primer paso, como ha hecho el Ayuntamiento, y «no quedarse impávidas ante las actuaciones de bandas neonazis que campan por la ciudad».
La concejala-presidenta de Arganzuela ha avanzado que el Ayuntamiento instalará placas de la memoria de Madrid -en forma de rombo, de color crema y letras azules- junto a las dedicadas a las víctimas del terrorismo.
Se trata de recordar en Madrid a otras víctimas del odio, como se hará en un futuro con Lucrecia Pérez, la inmigrante dominicana asesinada en de 1992 y considerada como la primera víctima de xenofobia reconocida como tal en España). Yolanda González (asesinada por ultraderechistas de Fuerza Nueva en 1980) ya da nombre a un espacio en la ciudad.
«Nos pareció oportuno y necesario porque creemos que el plan de memoria de Madrid debe incluir a otras personas, a personas humildes que han dado su vida y han sido víctimas de delitos de odio», ha remarcado la edil.
La madre de Carlos Muñoz, Mavi Muñoz, ha destacado, que es «un avance importante» que se haya reconocido a su hijo por su «lucha antifascista». Para eso ha sido clave la entrada de Ahora Madrid en el Ayuntamiento, ha destacado. «Estoy feliz, la verdad que sí, pero hay mucho por lo que trabajar todavía», ha declarado.