Segundo día de paros parciales en la empresa municipal de autobuses (Aucorsa). Después de una primera jornada (la del lunes) que tuvo un seguimiento masivo y en la que no hubo que lamentar incidencias reseñables más allá de un retraso en la salida de los servicios mínimos, la protesta de los trabajadores continúa. Con un cambio importante: los servicios mínimos fijados para el miércoles son del 40 por ciento y no del 25, a fin de no perjudicar a los estudiantes que se examinan de Selectividad.
Cuarenta autobuses circularán entre las 6.00 y las 9.00. Dos de la línea 1, cinco de la 2, cuatro de la 3, tres de la 4, otros tantos de la 5, cuatro más de la 6, otros tantos de la 7, tres de la 8, otros tantos de la 9, uno de la 10 y otro de la 11, tres de la 12, uno de la 13, dos de la 14 y uno de la línea que va a Rabanales. A partir de las 9.00, se retoma la normalidad en el servicio.
La huelga de los trabajadores, que reclaman entre otras cosas soluciones para los problemas de seguridad que sufren conductores y viajeros, está mellando de forma importante las ya complicadas relaciones entre estos y el gerente de la empresa, Juan Antonio Cebrián (PSOE). La cuerda sigue tensándose y ni el Ayuntamiento ni los empleados dan su brazo a torcer. Lo ratifica el presidente del comité de empresa, Custodio Sánchez: «No hemos recibido hasta el momento ninguna llamada por parte del equipo de gobierno de la ciudad para hablar con nosotros y tratar de llegar a un acuerdo. Y digo ninguna llamada: ni de la alcaldesa ni de la presidenta de la empresa. Nada».