
Rusia cree que la OTAN está buscando alguien con quien pelear, y sigue tomando precauciones. «A veces a uno le da la impresión de que Occidente necesita mantener la disciplina en su propio bando, el llamado ‘atlántico’, y para eso es necesario un enemigo externo«, dice el presidente ruso, Vladimir Putin, en una entrevista en la película de Oliver Stone Ukraine on fire [Ucrania en llamas], citada por la agencia rusa Sputnik. Por eso, explica el presidente ruso, Rusia se ve obligada a «aplicar contramedidas, apuntar con nuestros sistemas de misiles a los objetivos que, según nuestra opinión, comienzan a amenazarnos» en Europa.
De hecho, este lunes se ha conocido que Moscú va a fortalecer el sistema de Defensa Aeroespacial en el flanco occidental en respuesta al emplazamiento de lossistemas de defensa antimisiles emplazados por EEUU en Europa. Este fortalecimiento incluye el emplazamiento de S-400 y sistema Iskander en Kaliningrado (territorio ruso entre Polonia y Lituania), así como la creación de nuevas unidades en los Distritos Militares Occidental y Sur.
Este sistema para protegerse de misiles balísticos incluye ahora mismo cuatro buques destructores de EEUU emplazados en la base de Rota, y un radar en Turquía; además, en el futuro integrará también un puesto de radares y antimisiles en Redzikowo, Polonia. En mayo, la OTAN puso en servicio el sistema estadounidense Aegis Ashore en la base rumana de Deveselu.
Aunque el sistema es defensivo, Rusia señala que la infraestructura creada en Europa puede ser reequipada para el emplazamiento de armas de ataque.
El nuevo despliegue militar que lleva a cabo Moscú también se desarrolla en Oriente Próximo. Rusia renovará la infraestructura de su base aérea en Hmeymim (Siria), incluyendo la construcción de una segunda pista en este aeródromo. La actual se está desgastando rápidamente por la alta frecuencia de los vuelos, ha dicho a los medios el senador Victor Ozerov, presidente del comité de Defensa y Seguridad en el Senado ruso. En la reforma también incluirá la habilitación de lugares de despliegue de radares y plataformas de lanzamiento de sistemas antiaéreos, zonas residenciales y la ampliación de la zona de exclusión para dotar de mayor seguridad al complejo.
Rusia también quiere modernizar su base naval en el puerto sirio de Tartus, instalación que podría acoger en el futuro navíos de gran tamaño como el portaaviones Admiral Kuznetsov y que permite ampliar la escuadra rusa en el Mediterráneo. Este portaaviones y su flotilla causaron en octubre quejas a España por parte de algunos socios de la OTAN por su disposición inicial a permitir que pudiesen repostar en Ceuta. El mes pasado, el Ministerio de Defensa ruso ya anunció que crearía en Tartus una base naval permanente. Ahora las instalaciones acogen buques de guerra y auxiliares de diversa clase. También ciertos tipos de submarinos. Pero en la zona se encuentra el Admiral Kuznetsov, que participa en los ataques en Siria.