Los abogados del rey emérito esgrimirán en Reino Unido que la demanda de Corinna contra él por acoso, vigilancia ilegal y declaraciones difamatorias no puede prosperar por su condición de inviolable
Los abogados del emérito y de ‘Los Albertos’ llevaban casi dos años batallando para evitar que salieran a la luz las operaciones de 2015 en las cuentas de la Fundación Zagatka en el Credit Suisse de Ginebra, según las fuentes consultadas por ‘Público’, porque en ese año se hicieron allí numerosas transacciones para «limpiar el historial bancario» tras la abdicación del rey.
El papelazo que está haciendo el Gobierno más progresista desde los tiempos de Atapuerca es tan enorme que es imposible no verlo; sólo lo ignoran los que una y otra vez se empeñan en hacernos creer en las inexistentes bondades del Ejecutivo.
La Fiscalía prepara el archivo de sus diligencias por los datos que le facilitó Hacienda. El Ejecutivo deja una puerta abierta a que la Agencia Tributaria determine si la regularización de Juan Carlos I es válida o no.
El próximo martes, 12 de Octubre, los medios asociados a la Plataforma de Medios Independientes (PMI), de la que forma parte Público junto a otras 14 cabeceras de todo el Estado, publicará la segunda gran encuesta sobre la monarquía española, realizada por el prestigioso instituto demoscópico 40dB que dirige la socióloga Belén Barreiro, expresidenta del CIS.
El rey Juan Carlos, la reina Sofía y Felipe VI, en una recepción oficial al rey Abdulá en 2007. (EFE)
El Rey emérito recibió 100 millones de dólares de Riad días después de firmar un acuerdo bilateral con ese país y acoger en Madrid una cumbre que lavó la cara del integrismo religioso saudí
La imposibilidad de perseguir delitos anteriores a la abdicación en 2014, las dos regularizaciones fiscales, la prescripción y la falta de otras pruebas evitan la presentación de querellas contra el emérito
Juan Carlos I, durante un viaje en 2012, con el rey de Arabia Saudí, Abdalá bin Abdelaziz… ((EPA) EFE)
El Ministerio de Comercio intentó sacar a concurso la elección de los gestores, pero los saudíes se negaron. Compañías españolas se comprometieron a aportar 200 millones, pero la crisis lo frustró
El Rey Abdullah de Jordania, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso o el de Chile, Sebastián Piñera o cantantes como Julio Iglesias, Shakira o Miguel Bosé son algunos de los cientos nombres destacados que han sido nombrados en los Papeles de Pandora una importante filtración de datos de inscritos en paraisos fiscales.
El nuevo informe del Consorcio Internacional de Periodistas revela negocios ocultos para evitar impuestos como los de Corinna Larsen que pretendía que el Rey emérito Juan Carlos I cobrara el 30% de los ingresos provenientes de un Fondo de Inversiones Hispano Saudi.
El Código Penal solo exonera del delito fiscal a quien salde sus deudas con Hacienda con anterioridad a tener “conocimiento formal del inicio de diligencias”
Hubo una época que para engatuzar a los más posibles, que ni eran ni querían el entuerto de la monarquía digitada por Franco, que se acuñó lo del «juancarlismo». «¿Es usted monárquico? Yo soy juancarlista» decían desde Falsimedia los políticos, periodistas y los mal llamados lideres de opinión. Una jugada político-publicitaria no exenta de cierto pitorreo, para justificar a Juan Carlos de Borbón al frente de la Jefatura de Estado sin haber pasado por elección alguna, sino incrustado en la Constitución del 78.
Nuestros periódicos de derechas ya no saben cómo abordar el delicado asunto de la corrupción borbónica. Cuando, no ha tanto, la revista Forbes y otros medios extranjeros calcularon la fortuna oculta de Juan Carlos I en unos 2.000 millones de euros, la horda mediática vasalla salió clamando que los periodistas extranjeros no tienen ni puta idea. ¿Quién quiere a Woodward y Bernstein teniendo aquí a Eduardo Inda y a Paco Marhuenda?
Por primera vez un documento oficial apela al enriquecimiento del anterior jefe del Estado a través de «comisiones» por su «intermediación en negocios empresariales internacionales». La comisión rogatoria a Suiza plasma los posibles delitos del monarca siete años después de su abdicación y tres después de que comenzara la investigación preliminar de la Fiscalía
Debe estar conectado para enviar un comentario.