El papel de las mujeres, que ocupaban un alto porcentaje de la clase trabajadora, fue imprescindible para el triunfo de la Revolución rusa y la caída del zarismo. Los líderes bolcheviques se enorgullecían de ser pioneros en políticas de genero.

Marzo da el pistoletazo de salida a los actos del centenario de la Revolución rusa. En la revolución de marzo (febrero, según el calendario juliano), el hastío por la guerra y la carestía condujo a una revuelta social marcada por manifestaciones, motines y tumultos que finalmente forzaron la abdicación del zar Nicolás II y el establecimiento de un gobierno provisional, cuyo poder, sin embargo, compartía de facto con el Consejo de Diputados Obreros y Soldados de Petrogrado, más conocido como Soviet de Petrogrado. Seguir leyendo Lenin: «Sin ellas no habríamos ganado»