Ya están en la calle. Se trata de «El Niño», su hermano «Kike» y Javi «El Bombero», los tres supuestos cabecillas de los Ultra Sur, detenidos el martes pasado por perpetrar, al menos, dos robos con violencia e intimidación en un trastero de Majadahonda y en una vivienda de Alcorcón. En este último caso, simularon ser policías y además de llevar placas antiguas, portaban chalecos antibalas y dos revólveres simulados, con el fin de poder acceder al domicilio.

A todos ellos les han sido impuestas distintas medidas cautelares por los distintos magistrados encargados del caso. Además de retirarles el pasaporte y prohibirles salir del país mientras dure el procedimiento, a Enrique Menéndez, «Kike», de 26 años, debe comparecer en el juzgado cada semana. Se le imputan la supuesta comisión de un delito contra la salud pública, dos delitos de robo con violencia y un delito de usurpación de funciones públicas e intrusismo (simular ser agente de la autoridad).

Vuelcos de droga

Sobre su hermano, Antonio Menéndez Mories, «El Niño», de 29 años, líder de una de las las más duras de los Ultras Sur, que deberá acudir al juzgado una vez al mes, pesan las imputaciones de la supuesta comisión de un dos robos con violencia, uno de ellos con intimidación, y otro de usurpación de funciones e intrusismo.

A Javier Oviedo, «El Bombero», de 33, se le acusa de cometer un presunto delito de robo con violencia en una casa habitada. Así han informado hoy fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Estos delitos, nada tienen que ver con los ataques en los que suelen estar implicados contra miembros del Frente Atlético y la vieja guardia de los Ultra Sur, están relacionados con «vuelcos» de droga, es decir, robo a narcotraficantes a pequeña escala, y con la apropiación de diversos objetos de valor.

Así, en los registros efectuados en sus domicilios se les intervinieron 50 gramos de cocaína, dos escopetas, munición, un arma eléctrica, un inhibidor de frecuencia, 9 relojes y diversas joyas.

Fuente: ABC