La asamblea para la creación de la Casa de las Mujeres une al feminismo de Valladolid


Han consensuado un “Decálogo para la casa feminista de las mujeres de Valladolid” que presentarán a la concejalía de igualdad para la creación de este espacio

ALGUNAS DE LAS MUJERES ASISTENTES A LA PRIMERA ASAMBLEA PARA CREAR LA CASA FEMINISTA DE LAS MUJERES DE VALLADOLID. FOTO: MARTA ÁLVAREZ

Ante la intención de la concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Valladolid de abrir un ‘Centro Municipal de la Igualdad’, el Foro Feminista de Castilla y León convocó el 17 de marzo en el Patio Herreriano una mesa redonda bajo el título ‘¿Qué proyecto para la casa de las mujeres?’ con la participación de representantes de proyectos similares en Zaragoza, Donosti y Córdoba para compartir su experiencia. En el debate posterior a la mesa el sentir general fue que había que crear algo así en Valladolid, por lo que a las pocas semanas se convocó la primera asamblea para abordar su creación, con la intención de mostrar al gobierno municipal “la propuesta que los movimientos sociales o el feminismo de Valladolid tiene para esa casa de las mujeres”.

La concejalía manejaba un informe de viabilidad para este proyecto en el que hacen especial hincapié, casi exclusivamente, en la violencia de género, lo que desde esta asamblea consideran excesivamente asistencialista considerando que ha de hacerse una labor en la prevención de las violencias machistas entre otros ámbitos de acción: “En lugar de partir del documento lo que hemos hecho es tratar de elaborar un consenso previo en asamblea para tener unas bases de las que partir”, apuntan desde la asamblea en alusión al decálogo que acaban de presentar. “Nos parecía que el término igualdad dentro de una casa de la mujer ya está incluido, en cambio un centro de igualdad no tiene por qué ser feminista”, subrayando el perfil feminista de este proyecto.

Trabajo durante una de las asambleas. FOTO: Marta Álvarez
TRABAJO DURANTE UNA DE LAS ASAMBLEAS. FOTO: MARTA ÁLVAREZ

El siguiente paso es su reunión con Victoria Soto, concejala de educación, infancia e igualdad, para el próximo lunes 5 de junio. En este encuentro presentarán y debatirán los puntos del decálogo que han consensuado, en el que el apartado de la co-gestión es una novedad en lo que a las relaciones entre instituciones y movimientos sociales se refiere: “Hay una conciencia real para establecer un diálogo con la institución desde la calle, no mantener la contraposición”. Entre los diversos aspectos que aun están por concretar está el presupuesto como uno de los más importantes,

Actualmente están trabajando en el plan de usos de la casa: “Por una parte una propuesta de co-gestión en el que el movimiento asociativo de Valladolid, o la sociedad organizada en general, tenga un peso específico y por otro lado una propuesta de programa piloto, qué tipo de actividades se nos ocurren para que tenga el enfoque feminista que pretendemos o cómo materializar todas esas ideas”. Al hilo de esta propuesta organizativa, el espacio es uno de los puntos importantes para las integrantes de la asamblea, ya que cómo se acondicionen condicionará qué actividades se podrían realizar o no.

Cartel de la última asamblea obre de las Moscas de Compañía
CARTEL DE LA ÚLTIMA ASAMBLEA OBRE DE LAS MOSCAS DE COMPAÑÍA

“Hemos celebrado tres asambleas y en total han pasado 60 personas, más o menos, y la media de asistencia son 40, gente de todas las edades y de ámbitos del feminismo de Valladolid súper amplios”, destacan en cuanto a la participación. En la ciudad los colectivos feministas son tan numerosos como dispares en cuanto a ideologías, por lo que celebran la unión que se está viviendo en estas asambleas, desde las vertientes más autogestionadas a las más institucionalistas, movimientos LGTB, sindicales o culturales, entre otros, aunque en todo momento participan a título particular de esta iniciativa. Por eso también la asamblea es abierta a cualquier persona que se sienta apelada a participar, independientemente de su pertenencia o no a algún colectivo, para aportar su visión y trabajo para que este proyecto se materialice.

“Hemos pasado de imaginarlo a saber lo que queremos”, aseguran respecto al borrador de decálogo que han presentado. En este documento recoge diez puntos elaborados de forma consensuada mediante grupos de trabajo bajo la premisa de crear una casa de las mujeres con una perspectiva feminista, plural e integradora: “Un consenso de mínimos con unas líneas generales, que luego se pueden ampliar, en las que todas cabemos”. Pese a lo que muchas veces suele ocurrir o a primera vista parecer, este consenso surgió, según explican, de forma completamente espontánea, poniendo de manifiesto que estos puntos que aparecen son algo que ya habían reflexionado todas ellas por separado: “Desde la primera reunión teníamos claro que fuera asambleario, representativo, diverso, que estuvieran presentes todos los feminismos y, entre la gente que venía allí, ponerles a trabajar sobre qué idea quieren formándose varios grupos para trabajar y, a partir de una primera puesta en común, todos los grupos estaban diciendo lo mismo”, explican recordando la sorpresa y alegría del resultado de aquella jornada de trabajo, dadas las diferencias entre los grupos de dónde venían cada una de ellas. “Cada una ya tenemos nuestro espacio en el que puedes llevar tu proyecto político hasta el último extremo, pero si encontrar nexos comunes para hacer algo colectivo”. Este proyecto es una reivindicación histórica del feminismo de Valladolid, por lo que el entusiasmo que muestran al verlo tomar forma es notable.

BORRADOR DEL DECÁLOGO PARA LA CASA FEMINISTA DE LAS MUJERES

1. Un espacio por, para y con las mujeres

En esta casa, las mujeres seremos siempre las protagonistas en los procesos de decisión, en el diseño de las actividades y también su principal público objetivo. Además, se trata de crear un espacio de sororidad, igualdad, corresponsabilidad, empatía, cooperación y respeto.

2. Un espacio co-gestionado

Valladolid cuenta con un tejido feminista muy rico y con mucha experiencia que hará de este espacio una herramienta verdaderamente transformadora. Queremos superar modelos jerárquicos de intervención: la sociedad organizada tiene un enorme conocimiento de la realidad de la ciudad y la participación será un ejefundamental en esta casa.

3. Un espacio de referencia para todas las mujeres

Queremos que la casa sea un lugar donde las mujeres puedan recibir información y orientación sobre aspectos relacionados con la salud, derechos, igualdad y los feminismos o cualquier otro tema que les interese. Que sea un punto de referencia donde encontrar todos los recursos que tienen a su alcance.

4. Un espacio de encuentro y acogida

Queremos que la casa nos permita conocer las diferentes realidades que viven las mujeres de nuestra ciudad para así tejer redes de apoyo y solidaridad mutua. Un sitio donde nos sintamos bien recibidas, escuchadas y respetadas.

5. Un espacio de formación, documentación e investigación

Un lugar donde compartir saberes y talentos, cuestionar y reflexionar, aprender y enseñar; un lugar donde tomar conciencia de lo interiorizado para cambiar la realidad. Un espacio de investigación en el que podamos generar discursos propios a partir de nuestras reflexiones y experiencias.

6. Un espacio transversal e inclusivo

Nuestra sociedad está llena de diversidades, diferencias y matices, por eso, deben estar representadas en la Casa. Queremos un lugar inclusivo donde haya espacio para todas las diversidades: edades, etnias, razas, orígenes, diversidades funcionales, clases, identidades sexuales y de género, feminismos, etc.

7. Un espacio participativo

Queremos que la casa sea algo más que un contenedor de actividades. No queremos ser meras consumidoras de servicios, sino tener un papel protagonista en una casa libre, dinámica, creativa y abierta a propuestas e intercambios de saberes. Un lugar donde la heterogeneidad sea la base de un enriquecimiento colectivo.

8. Un espacio cómodo, confortable y abierto

Queremos que la casa sea un espacio vivo cuya esencia sea la actividad y el encuentro. Por ello, nos imaginamos un lugar multifuncional que aproveche sus ESPACIOS y recursos, que tenga pocos despachos cerrados, que dé el máximo protagonismo a los espacios compartidos y versátiles donde podamos encontrarnos y desarrollar todo tipo de actividades cómodamente.

9. Un espacio con perspectiva feminista

El feminismo será el eje en los procesos de toma de decisiones. Queremos que todos los servicios, actividades y recursos que ofrezca la casa partan de una perspectiva feminista y por eso el personal debe estar formado y sensibilizado en la materia.

10. Espacio donde compartir saberes y crear sinergias feministas

Todas contamos con conocimientos y habilidades que podemos compartir con el resto. Además, pertenecemos a movimientos muy diversos y la casa puede ser un lugar excelente para conocer otras iniciativas y perspectivas.

*Este decálogo puede ser actualizado por la Asamblea si así lo decide

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